Brazilian Aesthetic Care Conquers Miami With Treatments for Men
Pedro Pitanga is the founder and CEO of EPH – Estética Para Homens (Aesthetics for Men), the largest male aesthetics network in Brazil, currently present in São Paulo, Rio de Janeiro, and Miami. A visionary and pioneer, he transformed what was once a timid niche into a thriving market, creating an environment where men feel comfortable taking care of themselves—without stigma.
His professional journey began in journalism and digital entrepreneurship, where he developed a strong connection with communication, marketing, and male behavior. In 2019, he decided to merge his expertise with his passion for the world of beauty and wellness, launching EPH with an innovative concept: exclusive protocols, accessible language, and a customer experience designed 100% for men.
The success was immediate. In just a few years, EPH became a national reference, serving thousands of clients and consolidating itself as the leading brand in the segment. With more than 140,000 followers on social media, Pedro Pitanga is now one of the foremost voices on male aesthetics in Brazil, participating in events, conferences, and panel discussions on the subject.
In 2025, he brought EPH to the international market, opening the first location in the United States, in the Brickell neighborhood of Miami, with plans to expand the concept to other American and Latin American cities.
More than an entrepreneur, Pedro is a mindset shifter, breaking paradigms and proving that male aesthetics is not about vanity, but about health, confidence, and personal performance. His mission is clear: to ensure that every man feels both entitled—and delighted—to take care of himself.
FEATURE INTERVIEW:
Cuando fundaste EPH, hablar de estética masculina todavía era casi un “secreto de bastidores” entre los hombres. Hoy atienden a miles. ¿Qué cambió más rápido: la mentalidad o el mercado?
La mentalidad, sin duda. Cuando empezamos, en 2019, hablar de estética masculina era casi un tabú. Muchos hombres tenían ganas, pero no se sentían cómodos al admitirlo. Hoy veo a un público mucho más abierto, consciente e informado. El mercado acompaña ese cambio, pero el gran salto ocurrió cuando los propios hombres entendieron que cuidar de la apariencia no es vanidad — es invertir en uno mismo.
Mucha gente todavía piensa que la estética es solo vanidad. Para ti, ¿cuál es la parte más subestimada de este cuidado — y cómo impacta en la autoconfianza masculina?
La parte más subestimada es el impacto psicológico. Cuando un hombre se mira al espejo y le gusta lo que ve, se posiciona de otra manera en el trabajo, en las relaciones y en cualquier entorno. Se trata de postura, energía y confianza. Nuestros protocolos no entregan solo resultados físicos, sino que también refuerzan la forma en que el cliente se percibe a sí mismo.
EPH salió de São Paulo y Río y llegó a Miami. ¿Ya planeas conquistar otras ciudades? En tu expansión, ¿qué es innegociable para mantener el ambiente y la identidad que los convirtieron en referencia?
Expandir forma parte de nuestro ADN, pero siempre con mucho criterio. Por ahora queremos estabilizar, consolidar y crear un concepto fuerte, ya que lo innegociable es la experiencia EPH: una atención personalizada, protocolos exclusivos y un ambiente donde el hombre se sienta cómodo para cuidarse sin juicios. No renunciamos a la esencia que hizo crecer a la marca — ya sea en São Paulo, en Río o en Miami. Así que para crecer, este proceso debe estar alineado y fortalecido. Sin prisa, pero sí — podrían venir nuevas unidades.
¿Qué tratamiento de EPH crees que todo hombre debería probar al menos una vez en la vida?
El EPH Experience. Porque no es solo un tratamiento estético — es una experiencia facial, un ritual completo de limpieza, hidratación y revitalización. Es un hito para quien nunca tuvo contacto con la estética, porque ya en la primera sesión el hombre siente y ve la diferencia.
Writer: Leonardo Loreto (@leonardoloreto)